Knock, knock! ¿Alguien por aquí?

Hoy quise escribir acerca del pensamiento excesivo y la preocupación, dos temas que considero muy importantes porque soy de las personas que piensa y se preocupa demasiado. Tomó decisiones todo el tiempo a las que regreso, y como consecuencia afectan a la gente cercana a mi. Me preocupo por cosas como, mi madre está envejeciendo y el hecho que no estoy con ella. Me preocupa si mi negocio va a funcionar ahora que voy a comenzar de nuevo. Me cuestiono si soy un buen líder. Me preocupo por ustedes que me leen ¿Estoy compartiendo información importante o solo los estoy haciendo perder el tiempo? Y luego estoy preocupada por el hecho de que me preocupo y como pueden ver, estoy pensando  demasiado. 

Me pregunto de donde viene todo esto porque no creo que siempre haya sido así, creo que es un mal hábito al que me adapte con el tiempo, y siento que de la misma manera que lo aprendi tambien lo puedo desaprender. 

Ahora tomemos una taza de té, y continuemos... 

Se que la preocupación es parte de la experiencia humana. Evolutivamente era una manera de protegerse. Teníamos que preocuparnos por encontrar comida y un refugio porque eso podría significar la diferencia entre la vida y la muerte. Pero ahora las cosas de las que comúnmente nos preocupamos o al menos de lo que yo me preocupo son mucho menos peligrosas para la vida.

A veces me preocupa ¿si me veo bien? o ¿estoy realizada en el trabajo que hago? Y siento que durante gran parte de la historia humana o incluso si sólo miramos a los animales, cuando se trata de pensar y preocuparse, parece que hay un inicio de la preocupación como si algo la generara y luego entra la acción y la resolución, por lo que la preocupación en sí es bastante efímera.

Por ejemplo, sientes que estás en peligro y luego huyes, ahora te sientes segura. Pero siento que muchas de las cosas de las que nos preocupamos en la edad moderna se trata de cosas que no necesariamente se pueden resolver ahora mismo. Se tratan de situaciones que están en un futuro lejano y bastante intangibles o cosas que están completamente fuera de control.

No se si tu tambien haces esto, pero yo suelo crear  escenarios hipotéticos en mi mente todo el tiempo y puede tornarse bastante salvaje. Una vez leí esta frase alguna parte: "Mi vida está llena de cosas terribles que nunca sucedieron". Eso resume mi pensamiento excesivo en pocas palabras.

Y porque estas cosas no se pueden resolver en este momento, el pensamiento excesivo tiende a demorarse y durar,  debido a que no hay acciones, no hay resolución, por lo que nos sentimos atrapados en este sentimiento de incomodidad muy real y, a veces, incómodo. Una incomodidad que creo que proviene de sentimientos de incertidumbre. Tratamos de controlar lo incontrolable que es lo escondido del futuro. 

A veces también me pregunto por qué pensamos demasiado, acaso es una manera de prepararnos emocional, física y psicológicamente para el miedo, la pérdida y el fracaso, porque si ya hemos lidiado con las emociones negativas, hipotéticamente, tal vez sí sucede en la realidad, estaremos mejor preparados para enfrentarlas ¿No lo se? Pienso que ese es el problema de pensar y preocuparse demasiado. Estamos estancados pensando en el futuro o en algo que hicimos en el pasado, esto realmente nos despoja, nos roba estar aquí y estar presentes en este momento y conectar con las personas que tenemos a nuestro alrededor. 

 Lo que trato de hacer si me encuentro a misma en un ciclo de "pensamiento excesivo",  es cuestionarlo en el  momento, ¿es esto algo sobre lo que tengo control o no? Si es algo que no tengo control lo puedo reconocer como por ejemplo: preocuparme por el comportamiento de alguien más, o una decisión que tome y está hecha. Dicho y hecho está en el pasado. 

Reconozco que no tiene sentido continuar pensando y hago lo mejor posible por distraerme y sigo adelante. 

“Hay más cosas que pueden asustarnos que aplastarnos; sufrimos más en nuestra imaginación que en la realidad.”

- Lucius Seneca. 

Esa cita se quedo conmigo y siempre trato de recordarme a mí mismo que no tiene sentido enredarse en cosas que no podemos controlar. 

Claro que es fácil decir qué hacer. Lo que a mi me ayuda a reducir el ruido mental es caminar mucho, conectar con la naturaleza, tomar fotos..., hablar con alguien de confianza, poder contar el sentir y por último, escribir todo lo que preocupa  en un papel tan pequeño para que el cerebro interprete que si puedo escribir el problema en un pedazo de papel pequeñito, es que el problema no es tan grande. 

Lo que no sirve es mantener esa preocupación en la mente todo el tiempo porque es cuando el ciclo del pensamiento regresa. 

Así que externalizar y luego seguir adelante. Siento que es mucho más constructivo de esa manera.

Bueno, ¿y si hay algo sobre lo que tenemos control? como por ejemplo: ahorrar para comprar una casa, o comprar el carro. En estas situaciones podemos encontrar una manera de medir tomando acciones haciendo lo desconocido sea un poco conocido, al menos por ahora. 

Tengo curiosidad de saber si eres alguien que piensa demasiado, y si tiene alguna estrategia que hayas implementado y que sea efectiva.

Feliz domingo,

-Maria.